Plan de Acción para el aluminio circular

Plan de Acción para el aluminio circular

Plan de acción para el aluminio circular



En los últimos años, GHI ha centrado gran parte de su esfuerzo tecnológico en conseguir un mayor aprovechamiento de los recursos utilizados en los procesos de fundición y recuperación del aluminio. GHI ha desarrollado tecnologías que convergen con los objetivos del Plan de Acción para el Aluminio Circular. Estos desarrollos tecnológicos son fruto de sus valores propios  y de la demanda que existe en el sector del aluminio en pro de la economía circular.

El horno rotativo basculante, el horno vortex, el enfriador de escorias, el deslacador, las plantas Recycall y la plataforma de industria 4.0 Beyond, responden plenamente a esta inquietud.

La economía circular surge como una alternativa que permite desvincular el crecimiento económico del consumo de recursos y del deterioro ambiental. Supone una opción prometedora, capaz de solucionar los desafíos ambientales. Al mismo tiempo, crea nuevas oportunidades empresariales. No sólo trata de residuos: su enfoque es mucho más amplio. La economía circular abarca toda la cadena de valor: diseño, producción, consumo y reciclado, para convertir los residuos en recursos nuevamente.

El aluminio, recurso estratégico vital

El sector europeo del aluminio ha lanzado su propio Plan de Acción para el Aluminio Circular. Es una estrategia para alcanzar el pleno potencial del aluminio de cara a una economía circular en 2030. En él se demanda a los principales proveedores de equipos el desarrollo de tecnologías y mecanismos competitivos para recuperar la mayor parte de la escoria y la chatarra de aluminio empleada en el sector.

El aluminio es un material circular, capaz de ser reciclado una y otra vez sin perder sus propiedades de ligereza, conductividad, formabilidad, durabilidad y permeabilidad.

Estas propiedades lo convierten en un recurso estratégico vital en una economía circular y climáticamente neutra. El aluminio es el material del futuro para sectores clave como la construcción, el embalaje, la energía renovable o la automoción.  En el sector del transporte su uso ayuda a lograr sus propios objetivos de CO2 como la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.

Todo esto explica el gran crecimiento previsto -un 40%- en la demanda de aluminio entre 2019 y 2050.



Algunos datos sobre el reciclado de aluminio

El Pacto Verde Europeo, propuesto por la UE en diciembre de 2019, estableció el marco normativo de cara a disociar el crecimiento económico de la fuerte presión sobre los recursos naturales y el agotamiento de la biodiversidad. La mitad de las emisiones totales de gases de efecto invernadero y más del 90% de la pérdida de biodiversidad y del estrés hídrico proceden de la extracción y el procesamiento de recursos primarios.

Según el Plan de European Aluminium Association, el aluminio reciclado ya representa el 36 % del aluminio suministrado en Europa. A mediados de este siglo, el 50% de la demanda de aluminio de la UE podría ser atendida por aluminio reciclado, si se cumplen ciertas condiciones específicas.

Las estimaciones muestran que en 2030 se utilizarán 16 millones de toneladas de aluminio y en 2050, 18 millones de toneladas.

Se espera que parte del crecimiento de la demanda previsto será generado por la sustitución de otros materiales como el acero, el cobre, los plásticos, el PVC, la madera… Los beneficios de un mayor reciclado de aluminio son significativos.

El informe de la EAA sostiene que la cantidad de aluminio disponible para el reciclaje se duplicará con creces para 2050. Por otra parte y con una política marco adecuada, el aumento del reciclado de aluminio podría evitar hasta 39 millones de toneladas de CO2 por año para el 2050.

Como consecuencia, el volumen de aluminio importado también disminuiría. Se reducirá la dependencia de las importaciones de Europa y generará al mismo tiempo 6.000 millones de euros anuales para la economía europea.



Objetivos del Plan de Acción para el Aluminio Circular  

Los objetivos generales propuestos por la Asociación Europea del Aluminio son:

  • Maximizar la recogida y reducir las pérdidas
  • Mejorar la clasificación de la chatarra y el pretratamiento
  • Maximizar el potencial de descarbonización
  • Incentivar la inversión en actividades de reciclaje.

La economía circular ofrece la oportunidad de impulsar la competitividad utilizando sus recursos de la manera más eficiente, reinventando los modelos de negocio y creando nuevas oportunidades de trabajo y crecimiento.

Para lograr tasas de reciclaje de aluminio ambiciosas, se requerirá del trabajo tanto de la industria como del entorno para que aluminio logre su plena contribución potencial a la economía circular en 2030.

GHI apuesta por la circularidad del aluminio 

Gracias a sus avanzados componentes tecnológicos, nuestros equipos para reciclado ayudan a nuestros clientes conseguir los cuatro objetivos del Plan de acción del Aluminio Circular: alcanzar la máxima recuperación del aluminio hasta su total aprovechamiento y una alta eficiencia energética, llegando a la total circularidad de los recursos. 

GHI ofrece un tipo de horno determinado en función de la chatarra que se va a fundir, con el objetivo de obtener el máximo rendimiento metálico del aluminio. Por otra parte, los equipos auxiliares como el deslacador y el enfriador de escorias son el complemento ideal para el proceso.

Reciclado de chatarra y escorias de aluminio

Para la recuperación de chatarra de aluminio contaminada y escorias GHI suministra hornos rotativos basculantes.

Los llamados FRB son hornos especializados en la fusión de chatarras de baja calidad y en la recuperación del aluminio de las escorias. Destaca su versatilidad para todo tipo de chatarra de aluminio y su gran capacidad, de hasta 65 toneladas.

Asimismo,  el enfriador de escorias desarrollado por GHI y Befesa, enfría rápidamente la escoria salina generada en el proceso de fusión en el horno rotativo basculante.

De esta forma, se minimiza la oxidación del aluminio contenido en las escorias, lo que revierte en un mayor rendimiento metálico. También, se reduce el impacto medioambiental al reducir la cantidad de humos generados y se consigue mayor seguridad en las plantas de recuperación de aluminio.

Posteriormentese clasifican las sales y el aluminio recuperado mediante cribas, de cara a su posterior reciclado, tanto en el propio horno rotativo como en plantas de recuperación de sales. 

Reciclado de UBC y viruta de aluminio

GHI ofrece la última tecnología en hornos de tipo Vortex,  específicos para el reciclado de viruta, UBC, rebaba y finos. Son hornos de reverbero, dotados con un pesebre en el que se incorpora un sistema de agitación que genera un vortex para sumergir  la carga a fundir de forma efectiva y la dirige a la cámara de fusión.

Con el deslacador se eliminan los componentes orgánicos y la humedad de la carga antes de introducirlas en el horno Vortex.
Lo cual resulta en un alto rendimiento metálico y ademas, al 
precalentar la carga se obtiene una gran eficiencia energética en el horno fusor.  

Industria 4.0 y sensorización para reciclado de aluminio

Los hornos para recuperación de aluminio de GHI cuentan con sensorización avanzada, que permite controlar exhaustivamente el proceso. Gracias a la plataforma Beyond 4.0 desarrollada por GHI, se logra un ahorro significativo de energía en los procesos de fusión y recuperación de aluminio. 

Asimismo, esta plataforma de industria 4.0 permite controlar el proceso productivo para optimizar el uso de los recursos y disminuir los residuos.

Encuentre el informe completo del Plan de Acción para el Aluminio circular publicado por la Asociación Europea del Aluminio en: https://bit.ly/2C57w9X